Horno en Camarma de Esteruelas (Madrid)
HORNO DE INÉS, Mª CARMEN Y FERNANDO EN CAMARMA DE
ESTERUELAS (MADRID)
Muy buenas, estábamos deseando poder hacer esto, ya que es la señal
que confirma que por fin hemos acabado nuestro horno de leña. Hemos sido
asiduos a vuestra página desde hace ya bastante tiempo, la idea del horno
siempre nos atrajo, ya que somos unos auténticos seguidores del buen
comer y de las cosas hechas con cariño. Hace un año nos atrevimos a
construir la barbacoa en la que ya pusimos mucho empeño y buen hacer, ya
que nos sirve para reunirnos alrededor de ella y disfrutar con nuestros
familiares y amigos. Pero hasta este año no nos hemos atrevido con el
horno para el que ya dejamos destinado un lugar en la barbacoa. Por
supuesto nuestro más sincero agradecimiento a todas la personas que han
compartido sus experiencias en la web y a todos los que con su ayuda
desinteresada han hecho posible que hoy podamos disfrutar de nuestro
horno.
El tipo de
construcción elegida ha sido con ladrillos refractarios, ya que la idea
de los adobes se nos presentaba bastante difícil y laboriosa, el
resultado final de la barbacoa con el horno es la que podéis ver a
continuación:
El horno tiene un
diámetro interior de 1 metro, empezamos marcando la circunferencia y por
anclar la puerta a la base de hormigón desde donde iniciarimos la
construcción de la cúpula con ladrillos cortados a la mitad de su
longitud. Hicimos la primera hilada de ladrillos y en su interior pusimos
los cristales de botellas rotos y una capa de 25 kgs de sal gorda que
nivelamos con la hilada de ladrillos.
A continuación
formamos la base de ladrillos refractarios que fijamos con la 2ª hilada
de la circunferencia de ladrillos y rellenamos todos los huecos para
evitar que se pudieran mover con una lechada de mortero refractario.
Seguidamente formamos el arco de ladrillo de la puerta y empezamos a subir
la cúpula para la que usamos un molde de madera que posteriormente
romperíamos con cuidado una vez cerrada la cúpula. Pusimos dos hiladas
sin inclinación y a partir de ahí empezamos a colocar los ladrillos
siguiendo la inclinación que nos iba marcando el molde y rellenando bien
de mortero refractario aquellos huecos que quedaban entre los ladrillos.
En la zona donde se une
la parte superior del arco de la puerta y la cúpula colocamos un tubo de
Ø120 para la salida de humos al que previamente hemos colocado un disco
que podamos girar en su interior a modo regulador para la salida de aire.
Aprovechamos para poner
un cristal tipo Neoceram (se usan para las estufas y chimeneas) para poner
mas tarde una bombilla para altas temperaturas ya que cuando asemos de
noche puede venirnos muy bien. Continuamos con la cúpula hasta cerrarla
por completo, en los últimos ladrillos tenemos especial cuidado en el
relleno de las juntas ya que es lo que nos dará toda la fuerza para que
la cúpula se sustente.
Ahora es el momento de
empezar con el aislamiento, primero enfoscamos toda la superficie de la
cúpula con mortero refractario, posteriormente colocamos fibra de vidrio
en todo su alrededor y la sujetamos con malla de gallinero que nos
servirá de paso para dar otra capa de cemento, nosotros aprovechamos
cemento y arena que teníamos de una obra anterior y le añadimos a la
mezcla un aditivo líquido que convertía al cemento en hidrófugo para
que la lluvia no cale al interior del horno ya que está a la intemperie.
Una vez dada esta capa
de cemento hidrófugo, dejamos que el horno secara y posteriormente
retiramos el molde de madera de su interior. Uno de los problemas de usar
el molde de madera es que durante la construcción no podemos ir limpiando
los sobrantes de mortero refractario de su interior, pero la seguridad
durante la construcción de la cúpula es mayor sobre todo para los que
como nosotros no tenemos mucha idea de albañilería.
Finalmente para que
fuera a juego con la barbacoa recubrimos el horno de piedra natural que a
la vez pegamos con cemento blanco al que también añadimos el aditivo
hidrófugo, y tras unos días de secado procedimos a su ansiada
inauguración que hicimos coincidir con el cumpleaños de mi mujer (fiel
ayudante). Procedimos a su bautizo de fuego y todo salió según lo
esperado. Es muy importante usar leña de encina ó similar ya que el
poder calorífico de esta es muy superior a las demás leñas, el horno en
su encendido coge unos 400 ºC, una vez que esparcimos las ascuas hacia el
fondo del horno baja a unos 250 ºC ,este es el momento para meter lo que
queramos asar, ya que en unas dos horas baja la temperatura hasta unos 180
ºC más que suficientes ya que en esas 2 horas ya se habrá hecho lo que
hayamos metido al horno.
Y aquí tenéis muestra
del resultado final con mis mejores y más fieles ayudantes. Nosotros lo
estrenamos con ternasco para toda la familia y como podéis ver el
resultado fue espectacular, su ternura y sabor son incomparables a lo
hecho en un horno doméstico y si encima está hecho con cariño, ilusión
y sacrificio como es nuestro caso el resultado es inmejorable.
Gracias a todos los que han contribuido de alguna manera en la
construcción de nuestro horno y a todo el mundo que hace posible que esta
web exista, ya que sin ellos no habríamos sabido ni por donde empezar.
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